Optimizada 1280 pixels de ancho

sábado, 17 de marzo de 2012

Breve historia de la Masonería en España

El año de 1729 se establece la primera Logia continental en Madrid, la French Arms, es la primera de la que se dispone de fuentes fidedignas pues, aunque se habla de logias anteriores no se tiene documentos que lo acrediten ni constancia cierta de esa posibilidad Entre 1734 y 1767 esta logia fue mas conocida como la Matritense. El Duque de Wharton fue clave en su fundación .  En esta Logia se encontrará acomodo una buena parte de la minoría ilustrada, aristocrática e intelectual de la época.
En 1740, siguiendo los dictados del Papa Clemente XII en su bula “In eminente Apostolatus specula”, comienza la persecución de la masonería en diversos países Europeos y España, como país católico que era, no fue la excepción. Se puede afirmar, sin errores, que salvo ciertos periodos coincidentes con la República y hasta la democracia actual, la masonería no tuvo un discurrir tranquilo en España.

Entre 1750 y 1751, el trabajo de la Inquisición se hace muy patente y el propio Rey de España (Fernando VI) la prohíbe taxativamente. No podemos olvidar que el fundamentalismo religioso de los Borbones y al absolutismo político de la monarquía de la época ayudó a la Inquisición Española a ser sino la peor, una de las peores y más radicales, propiciando una de las persecuciones más encarnizadas de Europa. Curiosamente, será durante el reinado de Borbón, el Rey Don Juan Carlos I, que la masonería es legalizada por el Tribunal Supremo poco después del fallecimiento del General Franco en 1975.


Durante la ocupación Napoleónica, la masonería tiene un breve respiro, pero con matices; pues al igual que en Francia, Napoleón permite su existencia pero manteniéndolas bajo su control y vigilancia; podemos afirmar que no se prohíben pero se controla con lupa todo lo que pasa en el interior de las Logias y los masones sospechosos de sedición son encarcelados sin piedad.

El año de 1820, tras la liberación del yugo Napoleónico, el gobierno nacido del proceso libera a todos los masones y permite el trabajo sin atadura de ninguna clase.  Lo mismo sucede en 1854 durante el poder del General Baldomero Espartero, pues este era masón iniciado en América y permite trabajar al a masonería española con total libertad. Entre los años de 1820 a 1854 la masonería había sido perseguida y  muchos masones condenados a muerte.

Se repite nuevamente el caso anterior, entre los años posteriores al gobierno militar (1856) y la expulsión de la Reina Isabel II en 1868, instaurándose la Republica, la masonería vuelve a conocer la persecución de sus miembros y la prohibición de sus trabajos. La  Masonería no solo era permitida en la República, sino que también era tenida en cuenta. En el mes de octubre de 1868, el Supremo Consejo presentó al Gobierno provisional un programa legislativo de inspiración masónica, formado por catorce proposiciones, que entre otras reformas incluía las siguientes: libertad de cultos, supresión de las órdenes religiosas, secularización de los cementerios, sujeción del clero al servicio militar, matrimonio civil, etc. Este programa mereció ser atendido por aquel Gobierno.

La masonería vive un periodo tranquilo. Durante los años 1885 – 1931 la Reina-Regente Dña. Maria Cristina de Hausburgo y D. Alfonso XIII de Borbón permiten trabajar la masonería española en una ambigüedad legal dado que  no es  legalizada.


La segunda república Española

En 1931 se proclama la Segunda República española y  la masonería alcanza su mayor esplendor: Es legalizada y pasa a ser muy considerada por la mayoría de las instituciones gubernamentales .

La relación de masones prestigiosos en este periodo de la historia de España es abultadísima. No debemos olvidar que de los 470 diputados de la Cortes Constituyentes de la República, 183 eran masones y eso teniendo en cuenta que se supone que el número total de masones en España no superaba los 5.000 miembros.

 Nombres ilustres de la política española de aquellos años  y masones son  : Diego Martínez Barrio, Alejandro Lerroux, Fernando de los Ríos, Casares Quiroga, Largo Caballero, Manuel Azaña, Marcelino Domingo, Nicolau d’Olwer, Abad Conde, Luis Jiménez de Asúa, Emiliano Iglesias, Ricardo Samper, Álvarez del Vayo, Pedro Rico, Belarmino Tomás, Luis Araquistáin, Llopis, Domingo Barnés, Portela Valladares.

En Madrid se reúne en el segundo trimestre de 1931 la Asamblea General de la Gran Logia de España, en la que se fragua una importantísima declaración de Principios que podríamos asimilar a una PreConstitución Española que habría de otorgarse la II Republica. En ella se mencionaba la Ley de divorcio, el matrimonio civil, la legitimación de los hijos naturales, la separación de la Iglesia y el estado, la trasmisión de propiedades, etc. Sin embargos los acontecimientos posteriores con el triunfo del General Franco en la Guerra Civil Española darían al traste con esta avanzada  Constitución y acabaría también con la libertad de los masones durante 40 largos años.....y con la libertad de todos los españoles.

La época Franquista
El triunfo del General Franco en la guerra civil española el año 1939 acaba con todas las libertades democráticas en el país y, por supuesto , la libertad de asociación de la masonería no fue una excepción.

Las persecuciones del régimen franquista, encarcelamientos, fusilamientos y el exilio para los que tuvieron la suerte de poder escapar, marcaron el fin de la Institución en el país,durante un largo tiempo que no termino hasta la vuelta de la democracia, cuando por fin fue de nuevo permitida y luego legalizada.

La masonería no solo fue prohibida sino que fue usada como enemiga del pueblo, al igual que el comunismo y los judíos, formando el contubernio o conspiración Judeo-masónica cuyo fin era acabar con el régimen y todo lo bueno que este traía. Para ello no se escatimo en nada: miles de españoles fueron declarados masones y condenados a cadenas perpetuas, penas de cárcel muy largas o incluso fusilados; sus bienes: incautados por el Estado…todo esto en cifras con creces superiores al número real de masones que había en España. Se supone que fueron acusados unos 30.000 españoles cuando solo existían unos 3000 a 5000 masones en todo el territorio.
Sin embargo, el mayor daño causado a la masonería no fue este, sino todo lo que se dijo que era. La Iglesia de aquellos tiempos, afín al régimen franquista, no perdió la oportunidad de perseguir a su enemigo una y mil veces declarado por bulas papales. Fuimos así declarados enemigos del régimen, de la Iglesia, acusados de cualquiera crimen inimaginable, tachados de satánicos, de adorar a Baphomet, de asesinar niños en misas negras..y un largo etc que incluso hoy, tras mas de 30 años de democracia siguen a pasar factura y muchos españoles creen cierto.

El 15 de Septiembre de 1936 se da a conocer el primer decreto contra la masonería española y otras asociaciones; en su primer articulo se puede leer:

La Franc-masonería y otras asociaciones clandestinas son declaradas contrarias a la ley. Todo activista que permanezca en ellas después de la publicación de esta ley será considerado como crimen de rebelión
El 1 de marzo de 1940 se promulga otra ley de similares características pero mucho más fuerte en la que se asocia Masonería con comunismo. Esta ley profundiza en la estructura de la masonería y delimita hasta que punto es grave el delito de pertenencia en virtud del grado masónico que se tenga, siendo mayor el delito cuanto mayor sea el grado.

Como resultado de todo esto la Masonería desapareció de España. En este periodo los masones en el exilio recibieron ayuda y protección de sus hermanos y participaron en los trabajos de las Logias de los países que les dieron asilo. En muchos casos tuvieron la oportunidad de ingresar en Logias regulares en cada uno de esos países y ello finalmente  influyó de forma favorable llegado el  momento de reemprender actividades masónicas en España.

La democracia
En el año de 1975 se produce la muerte del General Franco y la subida al poder del estado, como Rey de España, de Su Majestad Don Juan Carlos I; se conforma un gobierno de transición que trabaja en busca de unas elecciones y una Constitución. El año 1979 se producen las primeras elecciones generales democráticas en España, que son ganadas por la Unión de Centro Democrático que lidera D. Adolfo Suárez. Se consolida el proceso iniciado de  democratización del régimen franquista tras la muerte del Dictador y en 1978 se aprueba la Constitución democrática del Estado Español en una de las mayores participaciones democráticas que se recuerdan en nuestro país: más de un 78% de participación. Asi mismo, la ratificación dio una base segura a la nueva constitución ya que fue aceptada por un el respaldo del 94,2% de los votantes.  A su amparo las actividades franc-masónicas dejan de ser ilegales.

A partir de este momento, unas pocas Logias pudieron reconstituirse, y otras, con la ayuda de la Gran Logia Nacional Francesa, se fundaron cerca de la frontera para aceptar nuevos miembros españoles.

Sin embargo, el proceso de legalización no llegaría hasta 10 de  Mayo de 1979 con un fallo de la Audiencia Nacional que legaliza la Masonería en España, fallo que fue posteriormente ratificado por el Tribunal Supremo el 3 de Julio del mismo año ante la negativa de Interior de inscribir la masonería en el registro de asociaciones. A partir de dicho momento, podemos afirmar que la masonería vuelve a ser libre y legal en España…esperemos que por muchos años.

 Desde su fundación en 1981, la Gran Logia de España ha sido dirigida por los siguientes Grandes Maestros:

1.    Luis Salat Gussils: 1981-1994
2.    Tomás Sarobe Piñeiro: 1994-2002
3.    Josep Corominas i Busqueta: 2002-2006 (diputado del PSOE)
4.    José Carretero Doménech: 2006-2010
5.    Oscar de Alfonso Ortega: 2010 -

Y el resto pues será historia en un futuro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Todos los comentarios son revisados por un moderador.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...